Mientras estudiaba en la escuela de arte, en medio de una búsqueda confiada por el puntillismo, Phil Hansen comenzó a tener un temblor en sus manos que fue en aumento impidiendo el trabajo que hacía hasta ese momento. El diagnóstico fue devastador: tenía un daño neurológico permanente. El médico al ver su trazo desigual le preguntó ¿por qué simplemente no aceptas el temblor? Y eso hizo Hansen.
El joven artista comenzó a explorar la fragmentación que había conocido en el puntillismo con nuevas técnicas, a ver las posibilidades. Sin embargo, al tiempo le sobrevino una crisis creativa y no venían las ideas que tanto anhelaba. En un proceso de introspección descubrió que estaba paralizado por el mundo de opciones que tenía y, acordándose de sus manos temblorosas, decidió acoger el temblor e intentar ser más creativo buscando las limitaciones.
«Las limitaciones pueden ser de los lugares más improbables para aprovechar la creatividad, pero tal vez es una de las mejores formas de salir de la rutina, repensar categorías y desafiar las normas aceptadas. Y en vez de decirnos unos a otros que aprovechemos el día, quizá podemos recordarnos cada día aprovechar la limitación»
Una charla inspiradora que sólo te tomará diez minutos y dejará en ti un gran impulso creativo y el desafío de ver las cosas desde otra perspectiva.