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Mientras escribo

Hoteles embrujados, adolescentes con habilidades telequinésicas, monstruosos payasos o malignos animales resucitados. Stephen King ha alimentado el imaginario colectivo de escenas de horror, sumando millones de seguidores (y unos cuantos detractores) ante su prolífica carrera como escritor, que lo posiciona como uno de los maestros del terror en la literatura contemporánea. No por nada King asegura llevar una estricta rutina que lo lleva a escribir 2000 palabras diariamente, independiente del resultado de esos textos.

He leído varios títulos de Stephen King, alabando especialmente icónicos relatos como El Resplandor e IT, sin embargo, confieso que mi favorito nada tiene que ver con temibles personajes: Mientras escribo es una obra autobiográfica en torno a la escritura y – seas o no un lector aficionado a sus relatos de terror – un imprescindible si te interesa el tema. Dato curioso que puede respaldar mi recomendación: Mientras escribo fue destacado por el medio británico The Guardian como uno de los 100 mejores libros del siglo XXI.

Esta obra da inicio con recuerdos de infancia y juventud de King, presentándonos sus primeros impulsos como narrador, y conduciéndonos por parte de ese camino arduo que tuvo su primera gran victoria con la exitosa publicación de Carrie. Antes de eso King, junto a su esposa Tabitha y sus hijos, vivían en un pequeño departamento mantenido con el acotado presupuesto que les ofrecía sus trabajos y el tiempo de escritura era un lujo en el que no siempre estuvo seguro de invertir.

En este relato de vida y de escritura, King no tiene reparos en compartir los problemas a los que lo llevó la adicción al alcohol y a las drogas, ni como enfrentaría la recuperación de un fatal accidente el año 2000. Por supuesto, la segunda parte del libro está enfocada directamente en los consejos de escritura, donde comparte algunas herramientas prácticas que pueden inspirar al lector a cultivar sus propios hábitos como escritor.

¡Una obra entretenida, interesante y muy inspiradora!

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